“Lo que hizo por su feligresía nadie se lo quita, por eso venimos siempre a honrar su memoria”, opinó Santiago Reyes, del Cantón Las Tunas, Aguilares, en el peregrinaje del Trigésimo Aniversario del Padre Rutilio Grande.Rutilio Grande García (Sacerdote Jesuita), nació el 5 julio 1928, en El Paisnal, y fue asesinado el 12 marzo 1977, junto a sus acompañantes Manuel Solórzano, de 72 años, y Nelson Rutilio Lemus, de 16 años.Se sabe que iba a concelebrar la misa vespertina cuando fueron emboscados y murieron ametrallados.
Es reconocido como defensor de la Teología de la Liberación, y amigo de Monseñor Oscar Arnulfo Romero, pero, además, Rutilio fue un sacerdote que se identificó con su comunidad y fue el creador de las Comunidades Eclesiales de Base.
A raíz del asesinato, Monseñor Romero fue un firme demandante, como Arzobispo del país, ante el gobierno salvadoreño, para que se investigara el asesinato de Rutilio Grande.
Se sabe que Monseñor Romero realizó una reunión con sacerdotes, consejeros y pobladores de Aguilares, sobre la situación de la población y al terminar expresó su decisión de no asistir más a ningún evento gubernamental o reunión con el presidente, “hasta que se investigara el martirio” del sacerdote.
En su 30 aniversario, Roberto Ramírez, de la UCRES, afirmó que este acto es un compromiso de las comunidades de Aguilares y El Paisnal, con el trabajo realizado por Grande.“Esta gente viene por el mismo compromiso que tenemos, entre nosotros mismos como comunidad, como nos enseñó el Padre Grande, que siempre buscó la verdad y la justicia para nosotros, esto es un humilde reconocimiento”, señaló Ramírez.
Mientras, Joseph Deraymond, estadounidense miembro del Comité de Intercambio y Solidaridad, admitió la importancia de Rutilio Grande en la historia del país.
“Hemos venido a acompañar el peregrinaje hasta el lugar de su asesinato y respetamos mucho el significado que tiene para la gente pobre que se encuentra siempre con sed de justicia y paz. Rutilio sembró la semilla de una conciencia en la población y para todos nosotros la solidaridad y el respeto a los derechos humanos”, dijo.
La peregrinación terminó en el lugar conocido como Las Tres Cruces , posteriormente se oficiaría una misa en la iglesia de El Paisnal, presidida por el sacerdote Jesús Orlando Erazo.
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