11 de OCTUBRE de 1975.

11 de Octubre.

Ese día hubo eclipse
la luz apareció por el poniente
un sol rojo sangre elevándose
al tiempo que la música marcial
de tambores y trompetas se extendía
llevada por los vientos del floreciente octubre.

En el suelo de la casa yacían
tres guerrilleros del pueblo.

Aún quedaban colgados de las nubes
los cánticos bravíos de escopeta.

Aún fresca la sangre en las paredes
empapadas de amor aquellas letras
solitarias
grandiosas
solemnes
- FPL -

Ese día hubo eclipse
la luz apareció por el poniente
la ¨señorial¨ ciudad de Santa Tecla
se estremeció durante
ocho largas
trepitantes
y embravecidas horas.

Los perros se escondieron
(llegó la SIC, la Guardia Nacional, Policia Nacional,
cientos de ellos)
retrocediendo al impacto del coraje proletario.

¿Qué miserable se atrevió a interrumpir tus sueños de futuro EVA?
¿A apagar el fuego inapagable de tu risa CHICO?
¿A suspender tus proyectos de mañana TOÑO?
La repuesta fue firme.
Las armas de los guerrilleros
con la fuerza de miles de explotados
hicieron retroceder las sombras sanguinarias
que llegaron con gases lacrimógenos
y no se rendían los compañeros, duplicaban la furia
Metralletas y bazucas.
Y no se rendían los compañeros, triplicaban su furia.

Llegó la madrugada fría
y no se rendían
seguían firmes
empuñando sus armas, enseñandonos a todos
que así deben empuñarse
cuando la decisión de vencer es históricamente inevitable.

Ha pasado un año
y los compañeros no se rinden
liberan un combate prolongado
de miles de hombres y mujeres
que se proyectan hacia el triunfo revolucionario
que no se rinden al igual que vuestro ejemplo luminoso.

Noviembre de 1977.